Será inaugurado en febrero de 2010:
US$ 1,4 millón costará centro cultural chileno en Buenos Aires
En pleno Barrio de Palermo de Buenos Aires se levantará la única obra nacional que se inaugurará en el extranjero en 2010, para celebrar el Bicentenario.
Emplazado en los terrenos de la embajada chilena, el nuevo centro cultural contará con espacios para exposiciones, seminarios, teatro y cafetería. Aquí pasará de todo, aclara entusiasmado el embajador Luis Maira. La oficina de arquitectura de Sebastián Irarrázaval ganó el proyecto de diseño del nuevo inmueble. Superó las 24 propuestas presentadas en el marco de un seminario realizado por la organización Internacional DoCoMoMo (Documentación y Conservación del Patrimonio Moderno), el MOP y liderado por la Facultad de Arquitectura de la PUC.
El concepto que imperó fue anexarse al edificio de la embajada con un carácter lo más sobrio posible , explica Hugo Mondragón, director del magíster de esa facultad. El Centro Cultural Embajada de Chile se realizará sobre una superficie de 650 m, dentro del perímetro y adosado al actual edificio de esa cancillería. Se trata de una casona representativa de la arquitectura moderna chilena de fines de los años 60, por lo que cualquier intervención podía afectarla.Por una filtraciónLa Embajada de Chile en Argentina fue levantada en 1969 en lo que los antiguos bonaerenses llamaban el cerrito , de una altura de 6 metros sobre el nivel de la calle Tagle y entre los jardines de Palermo, recuerda Luis Maira.
El terreno nos lo donó el gobierno argentino, como canje del sitio y la casa de la Embajada de Argentina en Chile. La idea de levantar allí el centro cultural fue un hecho fortuito, recuerda Maira. Una filtración que se fue convirtiendo en una inundación de un sector del jardín que dañaba a los estacionamientos de la embajada obligó a retirar el pasto y colocar una placa de cemento. El técnico que hizo el trabajo aseguró que sobre esa losa se podía levantar 'hasta un mall' ; así surgió la idea de hacer un espacio de desarrollo cultural.
Se construirá con fondos del presupuesto aprobado para 2009 y debiera costar del orden de un millón de dólares. Es barato, tenemos el sitio y la construcción aprovecha esta base ya establecida. Utilizará los mismos servicios de aseo, y personal de mantención de la embajada , agrega el diplomático. Sobre cómo se decidirá la programación, Maira explica: Este será un espacio privilegiado para el nuevo agregado cultural que vendrá con el próximo gobierno. Siempre ha habido uno en Argentina. Lo nuevo será un administrador que habrá que contratar . Agrega que la figura moderna de un agregado cultural es más bien la de un promotor con capacidad de gestión y que tenga una buena relación con los creadores más que una personalidad de la cultura, como los que antiguamente ocupaban estos cargos, por lo general destacados pintores, poetas, o músicos.
Así y todo, para Luis Maira la cultura sigue siendo el talón de Aquiles en la relación bilateral entre Chile y Argentina. Hay siete comités de integración que funcionan increíblemente, lo único que no alcanza un nivel equivalente es la cultura; se hace bastante, pero es mínimo respecto a lo que se podría realizar. Recuerda que tradicionalmente en Buenos Aires hay un espacio para los grandes creadores nacionales: Si viene Antonio Skármeta y presenta un libro, es en los mejores salones o librerías argentinas; lo mismo pasa cuando llega Gonzalo Rojas o Nicanor Parra, cuando venía. Agrega que también son aplaudidos conjuntos musicales populares como Inti-Illimani, Illapu o Los Jaivas. Los que no tienen espacio son los creadores emergentes, escritores jóvenes, los nuevos cineastas. Aquí si tendrán un lugar .
Al consultarle si se plantea ubicar en las nuevas dependencias una librería para dar a conocer la literatura chilena, responde: Podría ser, este espacio ha sido proyectado con bastante flexibilidad para su uso. El acceso al nuevo recinto cultural será gratuito. El embajador recuerda que los centros de cultura como el de España o Italia - que son los más populares aquí en la Argentina - operan sobre subsidios públicos a la cultura del país correspondiente y pequeños cobros que van en beneficio directo de los exponentes.
Por ejemplo, ante una gran muestra de pintura, habrá que nombrar un curador. Será un proyecto que se mande por la embajada a la Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería, Dirac. Ella asignará los recursos y se pagará por el proyecto lo que corresponda. El plan es contar en las nuevas salas con una muestra permanente de pintura chilena. Lo hablamos con Alejandro Foxley, cuando era ministro de Relaciones Exteriores; me ofreció esa posibilidad porque la cancillería tiene acceso a una cantidad importante de buena pintura chilena que no está en exhibición, ya sea en el Museo de Bellas Artes o en otras reparticiones públicas. Además de exposiciones temporales y montajes teatrales o de multimedia, también se proyecta realizar seminarios internacionales.
Hoy no tenemos dónde traer grandes figuras de la vida académica chilena a discutir sobre los temas más variados. Un lugar como éste nos viene de perla.
Sebastián Irarrázaval: Arquitecto ganador La mayor cualidad de esta nueva estructura es que privilegia la simultaneidad de actividades y la continuidad espacial , asegura el arquitecto ganador del proyecto, Sebastián Irarrázaval. El profesional, egresado y profesor de la PUC, fue calificado como uno de los arquitectos emergentes más interesantes del mundo por la prestigiosa revista Wallpaper. Adelanta que el centro cultural generará una nueva cara hacia el parque que lo circunda. La presencia de una rampa de acceso a igual que la terraza de la cafetería ayudarán a activar lo que hoy por hoy es un espacio notable desde el punto de vista paisajístico, pero subutilizado. Junto a su equipo -que también integra Francisca Rivera como arquitecta asociada y Guillermo Hevia García como colaborador-, Irarrázaval se anexará con la embajada mediante la utilización de geometrías curvas, rasgo distintivo del actual edificio, y construyendo una cubierta vegetal.
