Parque Cultural Valparaiso



Esta obra, emplazada en las dependencias de la ex Cárcel, busca colaborar activamente en el proceso de reactivación de la ciudad de Valparaíso, aportando una infraestructura de primer nivel, que permita a coger tanto la actividad artística y cultural local, como iniciativas nacionales y extranjeras.

La explanada sobre la que se proyecta levantar el centro cultural registra una historia de antigua data. Durante la Colonia sirvió de barraca militar y acogió la construcción de un polvorín. Más tarde fue elegida para el levantamiento de la cárcel de la ciudad que, con el tiempo, adquirió una carga simbólica hasta que a fines de los 90’ sus ocupantes fueron trasladados y el edificio fue adquirido por el Ministerio de Bienes Nacionales.

La construcción del Parque Cultural de Valparaíso, espera por tanto, crear un Parque Cultural en el cerro Cárcel, a partir de un conjunto armónico de edificios de servicios culturales, en torno a un parque abierto a la comunidad; orientado a la extensión, formación de audiencias y acceso a servicios culturales y a la formación y fomento a la creación de diversas expresiones artísticas y artesanales; y esto en un contexto de áreas verdes, espacios de ocio y recreación que fomenten la comunicación y encuentro ciudadano.

Se trata de un edificio público de unos 10.000 m2 en un terreno de 2,5 ha, que incluye talleres, teatro, sala de exposiciones, servicios comunitarios, parques. Se estima que su inversión será de M$ 7.000. El inicio de las obras civiles están fijadas para el primer trimestre de 2010.

Los 7.000 m2, han sido divididos en:

• Área de Administración y Servicios  1.300 m2
• Área de Formación    1.200 m2
• Área de Difusión     3.500 m2
• Circulaciones y otros    1.000 m2

El proyecto a ejecutarse en el terreno de la ExCárcel de Valparaíso, fue seleccionado mediante Concurso de Anteproyectos de Arquitectura, en el periodo enero-marzo 2009. Se presentaron 118 propuestas.

La propuesta ganadora del primer premio, corresponde a los arquitectos Martin Labbe, Jonathan Holmes, Carolina Portugueis y Osvaldo Spichiger. En palabras de los autores: “El proyecto es una Operación, una intervención del espacio del entorno, más que un edificio. Es un espacio para Valparaíso, que se espera se inserte en la red de circulaciones y paseos existentes”.


Ubicación: Comuna de Valparaíso, Región de Valparaíso. 

Centro Cultural de Valparaíso: Pasado, concurso y presente.

A finales del 2007 se rumoreaba que un proyecto de Oscar Niemeyer se construiría en el terreno de la ex cárcel de Valparaíso. Niemeyer, famoso arquitecto brasilero de 100 años de edad, regalaría un proyecto a Valparaíso por el aprecio que le tenía a Pablo Neruda y Salvador Allende, un proyecto para el centro cultural en la ex cárcel del puerto, lugar donde no había puesto un pie el famoso arquitecto. ¿El resultado?, el rechazo de la comunidad y de muchos chilenos, que provocó que un año después, noviembre del 2008, fuese cancelado el proyecto. Sin embargo el proyecto tenía que construirse para el Bicentenario, por lo que a mediados de enero de este año se llamo a concurso, concurso que desde el viernes pasado tiene ganador.

El proyecto de Jonathan Holmes, Martin Labbé, Carolina Portugueis, Osvaldo Spichiger fue el ganador del certámen, que como nunca intereso a muchísimos arquitectos, ya qua además de atractivo, el concurso tenía pocas restricciones para participar. Para concursar sólo se debía contar con un arquitecto representante que tuviese como mínimo 5 años de experiencia, inscribirse por mail y entregar la propuesta.

El resultado, un proyecto que integra el centro cultural a la comunidad, que conecta mediante un paseo los dos costados y cerros de la ex cárcel, que crea para la comunidad una plataforma desde la cual se puede mirar Valparaíso, que maneja de forma correcta el programa y que mantiene la identidad del sector.

Sin duda el resultado positivo se debe, como hemos mencionado muchísimas veces en este portal, a lo abierto del concurso, en donde un jurado de muy buena calidad pudo escoger entre decenas de proyectos distintos. Así representantes del Gobierno, la comunidad y del Colegio de Arquitectos escogieron de acuerdo a distintos criterios el proyecto que gustaba y convencía a todos, sin importar el nombre del arquitecto o su trayectoria.

¿El pero?, un precipitado concurso, en meses complicados para la mayoría de los chilenos, razón por la cual (incluyéndonos) muchos no pudieron participar. Un concurso con un plazo de casi 2 meses de verano, y que deberá desarrollarse en detalle en cerca de 3 meses. ¿Porque? Debido a que al proyecto ya se le habían asignado los recursos, los que si no se “gastaban” dentro de los plazos, probablemente se perderían. Por lo mismo Municipio, CA y otros tuvieron que elaborar y coordinar un concurso y sus bases, en menos de un mes, después de todo un año en el que se meditaba si se debía o no construir el proyecto de Niemeyer.

¿Pero que hubiese pasado si el proyecto fuese de un arquitecto X contratado por el municipio y si no se hubiese publicado tanto como el de Niemayer? ¿Se habría enterado la comunidad de cómo sería su nuevo centro?,¿ubiesen tenido la plataforma para alegar o manifestar sus opiniones respecto al proyecto?


¿Qué pasa con el gigante listado de proyectos del estado; puertos, costaneras, hospitales, colegios, etc? Si se debe contratar a un arquitecto igual ¿no es mejor que sea un concurso abierto, del que los comprometidos puedan elegir el proyecto que les gusta y no tener que esperar a que el edificio se construya para conocer su propuesta?

Por Plataforma Urbana